25 de febrero de 2011

lovely?

En estos tiempos en los que teóricamente todo es amor, perdonar y querer a los demás, yo, que  pienso demasiado, 
me pregunto como sabemos si realmente queremos a alguien, no necesariamente a nuestro novio, royo o intento de ello, simplemente a nuestros amigos o incluso familiares...
y tras mucho meditar, he llegado a la conclusión de lo que lo que quiero a una persona es directamente proporcional al dolor que me causaría su pérdida.
Por eso me hago esta pregunta casi a menudo con la gente que me rodea, porque si realmente esa ecuacion matemática resulta que lo quiero debo recordárselo, nunca sabes cuante tiempo te durará contigo...
Normalmente también ayuda saber que te sientes cómodo con esa persona, que puedes decir lo que piensas y te incita a ser mejor, te duele todo lo que le pase y siempre que sonríe, sonries tu con él.

22 de febrero de 2011

De mi para ti.




Me enseñaron que la Tierra no era redonda del todo, que los políticos mienten, que la guerra es mala, que el cielo es azul, que las pistolas matan, que las fotos son recuerdos, que los peces nadan, que los pájaros vuelan, que lo único que no tiene solución es la muerte, que uno más uno son dos, pero sobretodo me enseñaron que los amigos de verdad son para siempre por muchos obstáculos que se encuentren.




Muchísimo cuqui.

21 de febrero de 2011

Nos quedan cosas que ganar, aunque muchas por perder.

Todavía nosé porque lo hago, cuando sé que todo está perdido, cuando parece que no me queda ni una mínnima aportunidad de volver a conseguirlo . Será porque para mi es un reto conseguir algo perdido y también lo no perdido , porque si no luchas no ganas , si no arriesgas no ganas.  Si lo intentas puedes perder, pero si no lo intentas estás perdido. Creo que esto es más fuerte que un simple reto, más bien una meta que queda por conseguir. La vida no es una meta , pero si un camino. Un camino que te tropiezas con sueños , metas y cosas que deseas conseguir sea como sea.

¡Luchar por lo perdido , y también por lo que queda por ganar! Valdrá la pena el esfuerzo? Algunos días pienso que para nada , y otros que si vale la pena. Podemos perder algunas cosas intentandolo , pero no sabrás si lo puedes conseguir si ni lo intentas. No intentarlo es de cobarde y creo que es hora de arriesgarme .





20 de febrero de 2011

ppp.

No me importa! 
Ni lo que digan, no lo que piensen ni lo que puedan llegar a decir sobre mi. Porque alguien me dijo una vez ''Nunca te arrepientas de nada de lo que hagas, si lo que has hecho es porque, en su momento te parecía bien hacerlo''. Estoy orgullosa de absolutamente todo lo que he hecho en mi vida, todo lo hice por alguna razón. Los comentarios son lo de menos, el daño que me hicieron ya lo he olvidado, me quedé con la seguridad de no haber hecho nada malo. He aprendido, poco a poco, a pasar de todo. Es una buena opción, una buena posición. Y es que en esta vida no hay que caer bajo, es mejor quedar por encima, como el aceite.


Tu piensas igual que yo, tu has echo lo que haría yo. 



19 de febrero de 2011

El mundo me da tanto asco que ya ni siquiera puedo cabrearme. No existe ninguna palabra que defina esto. No existe. Y es una auténtica mierda. Gozamos de un diccionario insultantemente enorme, he buscado por delante y por detrás y no encuentro una palabra con la que explicar todo esto. 
Podría decir que estoy fuera de todo, pero la realidad, la puta realidad, es que ahora estoy más metida en mi vida que nunca. Podría decir que estoy decepcionada, pero no estoy segura de esto último. Quizá lo más conveniente sea decir que estoy en un punto intermedio entre el cabreo y el cansancio. 
Más cansada que cabreada, creo. 
Tengo fuerzas, pero ¿qué parte de mí reclama esas fuerzas?
 Tengo valor, pero no sé para qué lo necesito. 
Tengo ganas, ganas que se mezclaron con una rabia intensa, enorme y peligrosa.
Y ya no sé cómo separarlas.
 No estoy triste. Me encantaría. Pero no lo estoy. Tampoco estoy contenta. Y no, en absoluto estoy buscando que alguien me diga cómo me siento.
 Tampoco escribo para encontrarme.
 Me toco y sé que estoy aquí. Me siento. Me veo, me huelo, me escucho, me respeto.
 Pero quizá necesite algo.
 O a lo mejor sólo quiero eliminar lo que nunca debió ocurrir.
 Borrar un fragmento de mi vida.
 A lo mejor necesito alcohol, ¿no? Droga para aclararme. No lo sé. Y es una mierda. Rectifico. Es una auténtica mierda. 
¿Calma? No, gracias. Estoy calmada.
 No hay nadie con quien pueda hablar de esto. Millones de personas que no me sirven para nada en este momento. Ni siquiera puedo hablar conmigo misma, porque no sé lo que siento. 
Porque me pongo a pensar y me quedo a medias, duele sentirse víctima de algo que ni siquiera controlas, porque no puedes, porque no quieres, porque no sabes cómo hacer para acabar con algo que te taladra la piel. Es como si tuviera los ojos vendados, y camino, no sé si hacia atrás o hacia delante, pero camino y me canso de no encontrar nada. Necesito una terapia que no existe, un medicamento que aún no inventaron.
 Algo que me alivie este sinsentido.
 Que prefiero sentir para mal, que no saber para qué siento.
 Que si tiene que doler, que duela, pero por favor, que comience ya
. No aguanto con esto dentro, necesito sacarlo de alguna manera, o al menos saber qué es, qué pinta tiene, a qué sabe y si va a dolerme mucho o si, por el contrario, me sacará una sonrisa en el próximo minuto.

14 de febrero de 2011

14.2.11

 He aprendido que me gustan más los días que nosotros establecemos como “nuestros” que las fechas “señaladasamorosamentehablando” a nivel mundial, dios sabe por qué…He aprendido que no me gusta poner “dios” con mayúscula, hay palabras mucho más importantes que nadie tiene en cuenta. He aprendido, por no decir “asumido”, que algunas personas no me escuchan. También he aprendido que el dolor une mucho más que cualquier otro sentimiento. Y me he dado cuenta, además, de que la vida es muy dura (últimamente se me había olvidado…). He comprobado que algunas personas sólo son amables cuando les interesa, y que si no sacan nada en beneficio, se aferran a la bordería y les importa una mierda que tú no tengas la culpa de que la gilipollez viva en su interior.
Y recuerda que las apariencias engañan…Pero no siempre. De vez en cuando, las cosas son lo que parecen ser. No te olvides nunca de que la envidia reina en el mundo, y lo más probable es que recibas puñaladas a diestro y siniestro si consigues tener algo bueno, y lo que es peor, esas puñaladas vendrán de gente que te quiere…En teoría. Y si consigues sobreponerte a todas esas cosas, te felicitaré; si no lo consigues, también te felicitaré, sobre todo por ser humano… ¿Quién no ha llorado alguna vez?
.

8 de febrero de 2011

Posdata : te quiero.

Querida Holly, no tengo mucho tiempo.
No literalmente, sino porque has salido a comprar helados y volverás pronto. Ésta será la última carta, sólo me queda una cosa por decirte: Esta carta no es para que me recuerdes ni para que compres una lámpara, puedes cuidar de ti misma sin mi ayuda.
Es para decirte cómo me he sentido, cómo me has cambiado, me has convertido en un hombre queriéndome, Holly, y por eso te estoy eternamente agradecido, literalmente. Quiero que me prometas algo: Que nunca estarás triste o insegura o perderás por completo la fe, que tratarás de verte con mis ojos. Gracias por aceptar ser mi esposa, soy un hombre que no se arrepiente. Qué suerte he tenido. Tú has llenado mi vida, Holly, pero yo sólo soy un capítulo de la tuya. Habrá más, te lo prometo.
Y ahora viene el gran consejo: No tengas miedo a volver a enamorarte, prepárate para esa señal que parece el fin del mundo.
Posdata: Siempre te amaré.



Querido Jerry, 
querías que me enamorara otra vez y quizá algún día lo haga, pero hay muchas clases de amor. Ésta es la única vida que tengo y es una cosa fantástica y horrible, corta e interminable de la que ninguno sale vivo. No tengo planes a parte de que a mi madre ya le toca volver a reírse. Nunca ha visto mundo, nunca ha visto Irlanda, así que la llevo a donde todo empezó. Puede que así lo comprenda.
Pd: ¿Lo puedes adivinar?

5 de febrero de 2011


Las personas no son ni negras ni blancas. Las personas son grises llenas de claroscuros. Así que por estadística, haciendo cálculos imaginarios, puedes fiarte un 60 %, desconfiar un 30% y el otro 10 % lo puedes dedicar a pensar que puedes confiar el 100% en alguien. Blanco, negro o gris, al fin y al cabo todos estamos cortados por el mismo patrón y querer pensar otra cosa es darle al 10 % demasiado valor.

4 de febrero de 2011

 Dos palabras , ocho letras.

2 de febrero de 2011

.

Un día escuché a alguien decir que no hay razones para un recuerdo... que aparece, sin más. 
Los recuerdos bonitos aparecen en cualquier momento y te hacen sonreír y aunque pertenezcan al pasado son como un soplo de aire fresco, ¿no? Porque te impulsan a seguir viviendo para ir acumulando experiencias al menos igual de especiales que las anteriores. Pero lo de los recuerdos dolorosos y un tanto oscuros es otra cosa. Y según esa frase que oí no recuerdo dónde, no hay explicaciones para la aparición estelar de un mal recuerdo. Vamos, que se supone que de repente en el momento más insospechado, algo que creías completamente enterrado, sale de la nada.
No sé, quizás es que sí que hay razones para un recuerdo. Tal vez es que no estaba tan enterrado como creíamos... o será que es muy difícil echar tierra encima de algo que nos ha dolido demasiado. Pero lo peor de la vuelta aunque sea instantánea de este tipo de recuerdos es que una no puede evitar preguntarse una y otra vez el porqué, la razón de su vuelta. Las cosas pasaron y el dolor pasó pero queda el resentimiento,la rabia y la impotencia. Porque ver cómo las cosas cambian radicalmente crea una impotencia un tanto asquerosa. De la noche a la mañana cuesta asimilar cualquier tipo de cambio, es lógico y normal. Y cuesta adaptarse y seguir con una sonrisa, como si todo fuese igual cuando sientes que se te llevan los demonios. Pero bueno, la vida no se basa sólo en luchar por lo que uno quiere y considera bueno.. también hay veces en las que aguantarse es lo que toca. Aguantar la situación, el cambio de tuercas de tu pequeño mundo, la nueva dirección hacia la que apunta tu vidaa. Y pasa el tiempo y a la vez,empiezas a comprender que todo fue mejor así y que lo que creías que sería perfecto para ti, hubiese sido malisimo de haber sucedido.Llegas a un grado de aceptación tan grande que sientes que las emociones han cambiado. Y es así. Todo ha cambiado. Un giro de 360 grados.
 Y recuerdas momentos, pero desde la lejanía y con la mente mucho más fría. Y sonríes, te sientes orgullosísima de ti misma y descubres que tomaste la mejor de las soluciones. Y que si los recuerdos vuelven a visitarte de vez en cuando es porque forman parte de tu vida, de tu trayectoria, de tu camino por el mundo... pero eso no quiere decir que no hayas superado lo pasado. Al contrario. Lo has hecho con creces y es eso lo que te permite verlo todo con distancia. Y sonríes porque lo mejor de los recuerdos que te transportan a momentos malos es que te hacen ver que has sido capaz de conseguir dejar atrás una parte de tu vida en el momento preciso y que eso, a la larga, ha sido lo mejor para ti. Y ahí epas cuando te das cuenta de que ese instante que se sa por tu cabeza no representa nada más que las cenizas de algo que acabó ardiendo. Porque como dice una canción preciosa, 'cuando se juntan dos ríos se hace fuerte la corriente'... pero lo que no dice es que cuando esos dos ríos llevan un agua completamente distinta y se juntan, acaban chocando y formando una colisión tremenda.






1 de febrero de 2011

memories

Siempre esperaré que el tiempo no te borre de mis recuerdos. Sé que no lo conseguiré, que inconscientemente, pronto serás una mancha en mi memoria. Una mancha que no podré observar con detenimiento porque duele demasiado recordar. Duele demasiado recordarte. Duele demasiado recordar lo que hiciste, bueno y malo. Duele demasiado recordarnos. Pero, aún así, la parte tonta de mi cabeza sigue esperando que tu recuerdo permanezca indeleble en el tiempo, como muesca en la madera, como cicatriz en el cuerpo, como resto de lo que un día fue un "siempre"
Tock,tock.
-¿Quién es?
-Somos los recuerdos, venimos a por tí.

¡UN DOS TRES, DEL MUNDO DESAPARECERÉ!